Muchos os preguntaréis como se consigue entrar en el modo a prueba de fallos en cualquiera de los Windows, a partir del Windows 98.
La solución es muy sencilla.
Lo único que hay que hacer para conseguir entrar en modo de fallos es pulsar repetidamente la tecla F8 justo antes de que el arranque del ordenador está a punto de quitar de la pantalla la información de la placa y la BIOS.
Para ello, antes debemos dar orden al ordenador de que se reinicie, o encenderlo y estar atentos a las señales.
Si llega a salir el icono de arranque de Windows, significa que no habéis pulsado F8 a tiempo.
A veces cuesta un poco cogerle el punto, dado que hay ordenadores que no muestran esta ventana o simplemente, arrancan tan rápido que no da tiempo casi nada. En este caso recomiendo empezar a pulsa la tecla F8 de manera repetida, justo después de arrancar el equipo.
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